jueves, 31 de diciembre de 2015

Nostalgia.


Nos nos enseñaron a desconfiar de los buenos, y tampoco nos dijeron que ser buena persona no significa portarse bien.

Quería decirte que te echo de menos, que a veces cuando miro al cielo y lo veo revuelto me acuerdo de mis día a tu lado. Que adoro los días grises aunque tú ya no me abrigues y que más tarde que temprano, aprendí a abrigarme yo sola la piel.
Quizá ahora puedo entenderte, y créeme, no es nada fácil. Quiero decirle que no soy yo, que no se ahogue en este charco. Pero a veces necesito que me hablen de mí misma, para no olvidarme.
Supe curarme las heridas sola, a salir porque tú ya no me sacabas. A frenar y mirar más cerca. Me diste más al irte que lo que podrías haberme dado si te hubieras quedado. Y no sé cómo agradecértelo sin besarte hasta las ganas.
Me siento tan libre que a veces necesito realidad para no salirme, yo que siempre he sido de vivir al margen para no torcerme; ahora ya me da igual.
He aprendido que la vida es eso, el momento, y los planes de futuro son sólo para cobardes. Que el pasado enseña más que recrimina, y que el tiempo, a veces amigo del hombre, todo lo deja atrás.
Debí darte las manos. Calmar esta ansiedad. Contarte que he juntado los extremos, que he cerrado los ciclos. Que he aprendido a ser, a secas.
Discúlpame si alguna vez te hice sentir culpable. Que no te lloré a ti, más bien a mis espectativas, y es una lástima que no las cumplieras.
Te habría hecho feliz entre mis manos, que aveces siento lástima por ti. Pero aún así, te quiero.

A veces hablo con la luna porque siempre me acompaña en cada insomnio, y contando el goteo del techo le explico que no todos los caminos conducen a Roma. Y todos hablan de sus ruinas.
Pero nadie sabe que aún en ruinas, sigue siendo bonita. Hablo de mi madre.
Y aunque la luna no me entienda, yo sé que el lobo siempre fue más de los míos. De enseñar los dientes y aullarle a la nostalgia. Por qué tú y por qué yo.
De viajar en solitario, a tientas de que podía volver a encontrarme con tus ojos y perderme. Justo ahora que acabo de encontrarme y no me disgusta lo que veo.
La vida es tan caprichosa, que me parece un asco no creer en el destino. Que tú y yo teníamos que encontrarnos en el sitio menos pensado después de tanto tiempo y que haya sucedido porque mis planes se hayan estropeado. Que de haber cogido otro camino ya te habrías olvidado de mis manos. Y qué bonito fue perderme en un instante en tu sonrisa.
No quiero volver a mentirme,
que he aprendido a salir porque tú ya no me sacas. Que ahora gato mi dinero en otras cosas, que he dejado los vicios y, a quién pretendo engañar.
Está bien: sigo en esto.
Me flipa como todo se derrumba y a nadie parece importarle. Ahora canto para no oírme, para desinhibirme de todo este drama. Acariciando mis muñecas para no cortarlas.
Que sigo queriendo ser la chica de tu baile. La del jazz a las doce de la noche.

Me pregunto en dónde estarás, 
quién te besará ahora las heridas
si lo hace con la misma ternura que yo.
Si has encontrado tu camino, si sigues en la línea de torcerte por las noches.
Yo sigo queriendo ser a medias en tu colchón. Ver amanecer Madrid, porque no importa el despertador.

Dejar de ser la chica triste, que ya aburre.
Encontrar al hombre que no huya de mí y escabullirme por la puerta de atrás.
No estoy hecha para estos trotes.
Quiéreme por encima de tus posibilidades. Sigo siendo la chica de las poesías a medias, por eso de que se desangra a media línea. Fumando en la terraza de cualquier sitio asqueroso.

Sácame a bailar,
baila para mí en la oscuridad.

viernes, 25 de diciembre de 2015

×.


Debe ser eso, que carezco de sentimientos. Que lo vengo avisando de hace tiempo; pero nunca llegué a pensar que fuera tan monstruo.
Que sí, no me importa hacer daño. Que sólo soy sombra, en el lado más oscuro de la luna.
Irónico, ¿no?
Quizá es eso. Que manejo dos caras y no sé cómo controlarlas. Que me arrepiento muy poco y arruino todo. Que soy yo la que duerme bajo la cama. Que soy yo la mala influencia de las que papá y mamá intentan alejarte. Que deberían encerrarme por insana. Proteger el mundo de mis garras. De romper todo lo que toco.
Y sí, quizá exagero un poco. Que al menos conservo un poco de cordura, por eso de que no salgo a la calle y vuelvo con sangre en las manos. Que por lo menos tengo salud, y ni eso.
Que me resguardo bajo mis vicios. Que le canto sonatas de invierno a mis demonios:

"Después de una noche en lucha con el pecado y el insomnio, nada purifica el alma como bañarse en la oración y oír una misa al rayar el día. La oración entonces es también un rocío matinal y la calentura del infierno que se apaga con él. Yo, como he sido una gran pecadora, aprendí esto en los albores de mi vida, y en aquella ocasión, no podía olvidarlo".

Que sí, que tampoco es que esto venga a cuento. Que yo subí a aquel taxi porque Madrid me estaba ardiendo. Que le contaba historias de odio a los folios porque esto de ser horrible por dentro no importa nada cuando eres bonita. Que la gente prefiere amor, pensar que todo es bello. Que nada les aflige. Vivir en su mundo de basura.
Ignorar que la vida es un asco.
Y así vivo yo, ignorando que soy un monstruo. Que arraso con todo aquello que toco, que debería proteger. Que ni siquiera me importa.
Así que cojo el folio como si fuera un arma y aprieto el gatillo.
Total, ser o no ser es algo que ya no recuerdo. Quizá lo fui antaño y ahora me  estoy pudriendo. Que madurar es empezar a pudrirse y a mí ya me están comiendo los gusanos. Que nos les di tiempo a ser mariposas y de haberlo sido alguna vez, las habría quemado. No hay quien viva en esta sombra. La luna ya no me deja aullarla y a mí ya no hay quién me soporte.

jueves, 24 de diciembre de 2015

-Suicidio personal-.


Si miras fijamente, ahí; más allá de tus narices, habrías encontrado mis manos sosteniendo todo lo que tengo, y entregándotelo a ti. -Habrías-.
Si tocas mi pecho, notarás que debajo algo late, fuerte, por ti.
Yo supongo nunca supe lo que era el amor, porque todo el que tenía a mi lado fracasó. Absolutamente todo. Y yo sólo quería un abrazo y un: buenos días. Cuando aparecía por tu puerta y tu me rechazabas.

Y sí, supongo que será amor porque todavía espero que te quedes. Que vuelvas, como siempre. Qu me traigas la calma que te llevaste por -ya no sé ni cuánta vez-.
Y sin embargo, te odio. Porque solo piensas en ti. Porque crees que eres el único con el corazón roto. Porque piensas que no sé cómo se siente estar sola rodeada de gente. Pero cariño, sé lo que es estar sola rodeada de amigos e incluso de familia. Se lo que se siente cuando la gente cree que eres un bicho raro, y te deja a un lado porque... ni siquiera sé porqué.
Y sé lo que es tener el pecho vacío, lo que es pasar una cuchilla sobre las venas, lo que es mezclar pastillas para que todo se acabe. Y dios, sigo aquí.
Y no conocía peor forma de suicidio que la de quedarse contigo. Y quizá si mi vida eres tú, me estoy suicidando.
Pero no lo eres. Yo sólo quería quererte todos los días, que te alegrases de volver a verme, que me leyeras tus poemas y que me abrazases en la cama hasta quedarnos dormidos.
Yo no quería atarte a mí, ni quería regalos de navidad, ni viajes a la playa con tus padres.
Sólo hacerte feliz. Eso era todo lo que yo quería de ti. Ni siquiera miraba por mí. Y tienes el valor de pensar que todo es culpa mía. Que siempre me enfado por tonterías y que no te entiendo.
Bien, pues háblame, pero esta vez, dime algo.
Yo ya no sé si quiero que vuelvas, si quiero que regreses, que te quedes, que me dejes en paz para siempre.
Pero te quiero, tonto. Y te puedo asegurar que ninguna chica va a quererte como yo lo hice, como yo lo hago.
Así que sigue buscando tu alma gemela. Sigue creyendo que es ella la que va a salvarte.
Sigue con tu vida y no me olvides, porque llegará el día en el que te arrepientas de haberme perdido.
Y yo, mientras tanto, prometo cuidarme y ser la chica perfecta que nunca fuí para nadie.

miércoles, 23 de diciembre de 2015

Remember us.

Antes de seguir escribiendo, quería comentarte algo.
Verás, las últimas mil veces que hemos hablado, la cosa ha terminado con una serie de silencios en los que yo digo algo, y después otra cosa para modificarlo, y luego me disculpo en cierto modo, y después lo retiro de cierta manera.
Esto sería divertido si nos basásemos en una escena de Mia Wallace y Vicent Vega; divertido las primeras veces, pero no tendría por qué ser así, porque yo debería ser capaz de marcharme diciéndote: "Que tengas un buen día, ya nos veremos".
Es evidente que me esfuerzo en buscar algo que decir, y después lo justifico entre silencios. Debería dejar de disculparme por ser extremadamente analítica acerca de esto, aunque realmente lo siento (no por ti, sino en un sentido más profundo, ¿sabes? Lamento mi desorden mental y ser quien soy. Hago lo que puedo, menos inyectarme heroína para cambiarlo, pero tengo cierto pánico a las agujas y muy bajo presupuesto).
Es obvio que la dinámica de las relaciones sentimentales nos fascina a ambos, y que los dos pasamos por lo mismo en cierto modo, y cada uno por su parte.
Está claro que me gustas mucho. Pero no de una manera opresiva obsesiva (bueno, puede que sí), sino de la manera que me estoy desviviendo para que formes parte de mi vida, o para averiguar a dónde nos lleva esto.
Semanas antes de conocerte hablaba sobre que sería una novia horrible en este momento de mi vida (y en cualquiera de ellos).
Me siento bien contigo, y me intriga la posibilidad de compartir algo contigo, cierto tipo de preocupaciones con regularidad (Inciso: quería estar contigo, luego me producía una sensación de vacío; que odiabas todas las canciones que a mi me gustaban; y a veces, me aburría tanto que provocaba discusiones con el fin de experimentar la sensación de estar a punto de perderte). Debido a la distancia que recientemente nos separa, esto no va a poder suceder de un modo natural, y debido a que yo soy como soy, me cuesta hacerme a la idea.
Y es por eso que intento averiguar si te veré cuando vuelvas a casa, o si piensas en mí cuando no estoy, o hasta qué punto estás dispuesto a complicarte la vida.
El día que nos conocimos, cuando me dijiste que me reuniese contigo en aquel parque, estaba convencida de que cuando llegase me habrías tomado el pelo y te habrías ido a algún otro sitio. Eres tremendamente impertinente.
Cuando comenzamos a mandarnos mensajes, los míos eran largos y recargados en un intento de demostrarte lo retorsido que era mi sentido del humor y lo mucho que sabía sobre "todo en general". Los tuyos eran breves y en ellos se podían leer nada y todo a la vez, porque siempre tenías la palabra adecuada que decir.
El día que intentaste besarme y yo me hice la difícil (para acabar cambiando los roles), mantuvimos nuestra versión de una amistad hasta que, al final, nos besamos en el parque de aquella urbanización y luego quise comerte a besos en las escaleras que subimos hacía no recuerdo dónde. Me decepcionó lo mucho que sabían a nicotina tus labios y lo callado que te quedabas. Todo esto fue seguido de meses de encuentros que a menudo me ocasionaban quebraderos de cabeza sin sentido.
Pasabas de mí durante semanas y durante ese tiempo bebía y fumaba mientras te odiaba imaginando que vendrías a disculparte y todo volvería a ser el sin sentido de antes.
Y tú estúpida confesión de ser completamente iguales.
Cuando empezamos a hablar más sinceros pensé que aumentaría tu "respeto" hacia mí, pero lo único que conseguía era más tiempo para finalmete volver a escabullirme esperando que nadie me preguntase a dónde iba, porque me vería obligada a mentir.
La última vez que nos besámos, antes de volver a la misma incertidumbre de siempre; pero mi corazón ya no está por la labor, si es que mi corazón lo había estado antes. De haber escrito esto entonces, habría adornado un poco la historia. Habría escrito sobre lo incomprendido que eres y que únicamente estabas trsite, asustado y que te sentías solo. Me habría reído al describir todas las extrañas libertades que dejé que te tomaras conmigo y tu general inmadurez. Antes de entrar a tu casa, siempre me recordaba a mí misma que no era precisamente ahí donde se suponía que tenía que estar, pero las paradas en boxes  están permitidas en la carrera de la vida ¿verdad?
Me consideraba a mí misma una especie de chica privilegiada con baja autoestima que era afortunada por compartir una pequeña parte de tu mundo y sentir que nadie más había entrado en él y que por esa razón no me considerarías una más que se conforma con sus relaciones de aporyo y con sus típicas historietas de amor.
Haríamos como Sid y Nancy y nos negaríamos a sentar la cabeza por el statu quo. Nosotros seríamos "guays".
No siempre fue fácil vivir dentro de mi cerebro.
Aun así, no conseguí entenderlo. Tú estabas ocupado con tus "otras cosas". ¿Por qué seguiría llamándote? Supongo esperaba que cambiases tu manera de ser; que me hablases claro de una vez sobre lo que esperabas de mí, incluso en nuestros peores momentos.
Confieso que, a pesar de sentir curiosidad ante esta nueva dinámica de falta de respeto, en el fondo no quería que todo ocurriese así. Hacía que me sintiera silenciada, sola y como si fuese una persona distinta a la que soy; una sensación que considero el punto más bajo de la misería humana, a la altura de la núseas extremas sin vómitos.
El final nunca llega cuando uno se lo espera. Siempre viene diez pasos después del peor momento, y luego da un giro extraño a la izquierda. No sé, siempre he pensado que los amigos pueden besarse si no se enamoran, a lo Pretty Woman.
El último día me dejaste ser yo misma, después me puse de los nervios esperando una disculpa que nunca llegó.
Creí que era lo bastante lista y lo bastante práctica como para distinguir entre lo que tú me hacías sentir que era y lo que realmete sabía que era.
Creí que era totalemente capaz de ser tratada con una indiferencia que rayaba en el desprecio al tiempo que mantenía una fuerte sensación de amor propio.
Obedecía tus "órdenes", convencida de que podía interpretar este papel al tiempo que protegía ese lugar sagrado dentro de mí que sabía que merecía algo más. Algo diferente. Pero no es así como funciona. Cuando alguien te muestra lo poco que significas para esa persona y tú vuelves a por más, antes de que te des cuenta empezarás a significar poco para ti mismo. Que te traten como basura no es un juego divertido ni nigún experimento intelectual transgresivo. Es algo que aceptas, que consientes y que acabas creyendo que mereces. Y te escribo esto porque supongo que tú has sentido lo mismo; pero yo intenté hacerlo complicado. Me dije a mí misma que yo me lo había buscado. Después de todo, nunca me dijiste que la cosa fuese en serio. Me dejaste claro desde el principio que eras un caso perdido y que decías las cosas como eran; aunque realmente nunca expresaste nada que me diese a entender que no era lo que buscabas. Y siempre volvías. Nunca prometiste que me llamarías.
Pero también creo que, cuando iniciamos una relación íntima, hacemos la promesa humana básica de ser honrados, de ser respetuosos mientras nos exploramos el uno al otro.
¿Cómo es posible que alguien que le importe tanto la justicia social le importen tan poco mis sentimientos?
Lo que quiero decir es, que la vida es un asco, que ya nadie puede fiarse de nadie, pero que yo he demostrado que lo mío no es un capricho de niña pequeña, que puedo llegar a ser insoportable y que no voy a parar hasta obtener una maldita respuesta.

PD: Si no tienes nada que responder, será una especie de justicia poética increíble. Y, sobre todo, siento que este mensaje sea tan poco divertido.
PD1: Cuidado con las taquicardias. Coge aire.

sábado, 5 de diciembre de 2015

La carta.

Me gusta cualquier lugar donde imagino que aparecerás espontáneamente, doblando alguna esquina.
Me gusta pensarte siempre que me lo permito y que dejo de temer al dolor.
Me encantaría escuchar ese tono de voz... tan agradable, dulce, melódico, hasta seductor, interesante.
Ese tono que queda perfecto para adornar todas esas acertadas palabras, donde increíblemente tu hermosa voz es capaz de ir de la mano con tus palabras, digas lo que digas, cuando expresas tu enojo, tus razones, tu filosofía, tu dolor, tu alegría y el placer de tus bromas, y tu música, cuando cantas, amo cuando cantas.
Podría pasarme todo el día hablando de ti, pero nadie podría entender tus maravillas en su totalidad, si no te han tenido como yo te he tenido, si no te conocen como te conozco.
Muy a pesar de lo que creas o no, nunca voy a olvidarte.
He tratado de buscar ese fulgor en algunos otros ojos, intento buscar unos tan hermosos, igual o más hermosos que los tuyos, he buscado tu chispa en muchos colores de ojos, en muchos tamaños y formas, en muchos rostros, y sin importar lo que sean, sin importar la mirada que tenga enfrente y cuán hermosa sea esa, prefiero ver ese par, expresivos, grandes y profundos, aquellos que siempre están hundidos en el cráter delicado de tus ojeras. Ante el solo, me has cautivado mirándome a los ojos, como el color de las nueces. Prefiero mirar la viveza de ellos con sus largas pestañas alrededor, vivaces que parece incluso que están alegres, aunque me consta que por dentro no tienes más luz que una cueva, que creo yo que te recuerdan que tienen vida, más vida aún que la tristeza y la fatiga que se ven de vez en cuando, están vivos, y quién sabrá mejor lo que es vivir que quien le pesa la vida, ¿no lo crees?
Me he vuelto adicta, no a tus ojos solamente, si no a tu cara, a toda tu cara, cuando te veo concentrarte en algo y busco tu perfil para poder observar tu pequeña nariz. Es la nariz más perfecta que he visto tan cerca.
Podría escribirte no una carta, si no un libro, un libro completo donde podría hablar de ti desde el prólogo, hasta el final y aún me quedaían palabras para hacerte una trilogía.
Si pudiera nombrar tus atributos, o lo que más me gusta de ti, no podría resumirlo, porque me gusta todo y todo es muy importante, estoy enamorada incluso de tus defectps, los cuales haces que te queden bien y no me explico cómo logras hacer que a mis ojos, parezcan virtudes.
Me gusta incluso cuando actúas como si fueras feliz, pero más me encanta hacerte sonreír y sin poder evitarlo me contagia tu alegría, es la satisfacción de poder hacerte feliz a ti, hombre sombrío, versátil, quien de un momento pasa de polo a polo, a quien si le mueves algún sentimiento, podrías hacerle explotar. ¡Parece que me encanta perder la paciencia! A veces eres tan tierno. A veces en tus manos se puede sentir el amor... y de tus labios tersos, carnosos y rosas de manera deliciosa, se puede percibir la ternura que aunque no digas nada que despida algún sonido de tus cuerdas vocales, aunque no digas nada te juro que se siente. Cuando tu sonríes y bromeas me haces sentir tan plena, tan tranquila, como si nada malo existiera en mi vida, todo se me olvida y siento que floto.
Es tan extraño. Y de un momento a otro, parece que estoy con el ser mpas indiferente y cruel. Que nunca va a enamorarse como yo de él, por que él es el humano y yo soy el juguete, el objeto, siempre quise que me observaras usar a los demás, porque muy a pesar de ser un objeto, quería ser tu objeto digno, no parecer tan utilizada, no parecer el entretenimiento de el bello niño que tiene mis hilos entre sus dedos y me trata como titere, que actúa como si me amara para confundirme y que siempre esté allí cuando me necesite. Y yo también tengo sentimientos, siempre los tuve, incluso mucho más que tú monstruo, pero a mi nadie me mira, en mi nadie piensa, porque no tengo tu cerebro manipulador e innovador, yo no poseo esa inteligencia tan profunda y atrayente, llena de gracia, una inteligencia que no slo esa capaz de devorar libros y mover un pincel con las manos de una manera precisa y creativa, que parece increíble que los trazos se hayn hecho en tu mente desde el principio. Por eso, yo siempre y para siempre soy y seré la estúpida. La hermosa persona de la qje enamoré, puede hacerme ver como la peor incluso cuando él se está quivocando.
Y esyo terriblemente enamorada, y digo terrible porque es lo que es, es horrible, es un infierno, porque ni siquiera me libero, porque tan solo con sacar un poco de tu, no sé si real o actuado juego de amor, me tienes de nuevo ahí, sobre todo y sobre todas, no importa a cuantos hombres tenga que esquivar para encontrarme de nuevo con tu mirada y tu estrecha cintura, que cuando abrazo me llena de amor al percibir su tamaño y la fragilidad de tu cuerpo.
Te odio.

jueves, 3 de diciembre de 2015

Me perdí.


Me perdí en sus ojos.
Me perdí en sus labios.
Me perdí en su voz.
Me perdí, si, perdí mi corazón.
Perdí mi paz por él.
Perdí mis limites, y creencias.
Perdí todo por ti, y él nunca cambio nada de sí.
Perdí lo que era, fui lo que él quiso, me perdí a mí.

miércoles, 25 de noviembre de 2015

¿Por qué ellas son así? Y ¿Por qué yo soy así?


Parecen perfectas con  su cabello peinado y todo arreglado, con su maquillaje superficial y con sus sonrisas falsas. 

miércoles, 18 de noviembre de 2015

Supe que era amor cuando mi corazón empezó a sonreír, mis ojos a brillar y al cerrar los ojos, él se encontraba en cualquier lugar.

sábado, 14 de noviembre de 2015

martes, 10 de noviembre de 2015

La parte más hermosa del cuerpo humano creo que es su espalda. Es tan simple, larga, e interminable. Se pueden contar sus lunares en su suave piel y debajo de tantas constelaciones encontrar su corazón latiendo suavemente.

domingo, 8 de noviembre de 2015

Quisiera ver un mensaje tuyo. A las siete de la mañana, a las cuatro de la tarde, o a las once de la noche. La hora me es indiferente, pero escríbeme algo, lo que sea. Te necesito.

lunes, 26 de octubre de 2015

No estoy segura de lo que siento, jamás lo estoy. Pero a excepción de usted, verlo fue como ver las nubes y no saber si va a llover o está anocheciendo. Quise decirle tanto que a la vez no sabía como empezar. No se preocupe, tal vez no estaba segura o esta fue la primera vez que vi a alguien sumamente importante para mí. Lo siento.

domingo, 25 de octubre de 2015

Días solitarios.

Es una ciudad aburrida permanecemos vacíos,
vagamos por las calles silenciosos,
sin saber qué buscamos

a veces el aire sopla a nuestro favor
y con la lluvia disfrazamos el llanto y
encontramos la paz

otros días el caos nos lleva a la cama,
no hay salida,
tampoco soluciones,

sólo queda
cerrar los ojos
y esperar el paso de otros 
días.


martes, 20 de octubre de 2015

Siempre te miro, esperando que me mires de la misma forma en que yo te miro a ti, pero a estas alturas tengo que entender que mis miradas jamás serán correspondidas.

domingo, 18 de octubre de 2015

sábado, 10 de octubre de 2015

Me agrada el sonido de los truenos, las brisas de la mañana, las lluvias de las tardes y la soledad constante.

jueves, 1 de octubre de 2015

•Aprecio más que nada mi vida interior, mi exquisito mundo privado, aquel que, aunque quisiera, no podría explicar.

Aprecio más que nada mi vida interior, mi exquisito mundo privado, aquel que, aunque quisiera, no podría explicar. Es tan fructífero, es de tantos colores y tiene tantísimos matices, que no se podría entender la dimensión ni la importancia que yace en él. Quisiera explicarlo. Quisiera que mi ocio tuviera sentido para la sociedad y, sin embargo, soy condenada. Sé que ahora no entienden. Pero ya van a entender. En algún momento mis compañeras de colegio tampoco entendían por qué cuando me decían 'Estás ojerosa', yo contestaba con una sonrisa cansada pero brillante. Y quizá siguen sin entenderlo; a decir verdad, me cansa tener que explicarle todo a la gente. Y no soy soberbia, no. Pero estoy cansada. Ni mi cuerpo, ni mi alma, ni mi mente están preparados para explicar mucho más, para vivir muchos años más.

sábado, 26 de septiembre de 2015

Lloras y lloras y no hay nadie ahí. Tus lágrimas no valen nada, a nadie le importas, estas sola.

miércoles, 23 de septiembre de 2015

Odio cuando me miras mientras abrazas a alguien mas, odio el momento en el que empezaste a fingir quien no eres, odio que me mires y te quedes pensando, quisiera saber qué piensas...
Pero más odio que nos miremos y ninguno de el primer paso,

martes, 22 de septiembre de 2015

"Tengo el derecho a romperme las veces que sean necesarias con tal de que alguna de mis piezas encuentre su lugar".

domingo, 20 de septiembre de 2015

Mi situación.

¿Nunca habéis tenido esa horrible sensación en la que notas que estas perdiendo a una persona poco a poco? Una sensación en la que sientes que estas solo, te notas vacío. Piensas que ya no eres nada para esa persona tan importante para ti. El pensar que la estas estropeando tanto que otra persona ocupará tu lugar, que otra persona la tendrá entre sus brazos, otra persona mejor que tu.

Amor.

Me ha costado trabajo entender las cosas; los sueños; los desamores; las sonrisas; los odios; el tema "amor", ¿acaso alguien puede hablar de otra cosa que no sea esa? ¿Por qué ese afán de querer estar con alguien? ¿Por qué ese afán de estar enamorados? ¿Acaso no saben lo que es la calma y espera? ¿Acaso no se ha preguntado por qué les pasan cosas "malas" en una relación? Están eternamente invitados a ser una persona capaz de vivir sin esperar que alguien los quiera. Son invitados a hablar de música, de comida, de animales, de arte, de cualquier otra cosa que no involucre las relaciones amorosas.
¿Qué les pasa?

sábado, 19 de septiembre de 2015

Y después de todo, me habló. Mi corazón se aceleró, comencé a temblar y las lágrimas comenzaron a caer.

jueves, 17 de septiembre de 2015

Mi diario.

De pequeña pensaba que las personas que se autolesionaban estaban locas, y tenía razón, estoy loca.

miércoles, 16 de septiembre de 2015


Quisiera ser fuerte, no llorar por nada, ignorar los comentarios, olvidar fácil, no ilusionarme, no abrir mi corazón a cualquiera. Y lo sé, sé que nadie es así, que tal vez haya quienes se muestren de tal manera, que todos interiormente somos débiles, que nuestros sentimientos no pueden cerrarse.
Pero me gustaría no ser tan débil.

martes, 15 de septiembre de 2015

"Sinceramente no quiero que te vayas. Pero para mi suerte, (o mi desgracia) no soy del tipo de persona que ruega. Si quiere salir de mi vida, allí esta la puerta. Si quiere quedarse, siéntese que le preparo café".

lunes, 14 de septiembre de 2015

Anoche te vi.

Estabas tan lindo, tan radiante. Con esa sonrisa, vaya sonrisa, derrite a cualquiera y aún más a mi. Tan sonriente pero tan distante, y yo con un poco de orgullo evitándote. Muero por que vengas y me hables, por noche como las de hace un tiempo, de risas hasta el amanecer, de ternura, de vos, y yo con el reloj en la basura. Esperaba eso... Pero no paso, y yo fui tan cobarde que no pude tomar la iniciativa de hablarte con un poco más de simpatía, ni siquiera para intentar demostrarte que no me pasa 'nada' cuando te veo. Pero estabas tan lindo, y yo tan orgullosa, que me encantaría volver a encontrarte para tener un nuevo final.


jueves, 10 de septiembre de 2015

Ella lloró hasta caer dormida, y hoy despertó con una sonrisa, tratando de hacerse creer que todo está bien. Ella es fuerte. Ella eres tú.

sábado, 5 de septiembre de 2015

Das asco...

Das asco... Das asco... Mírate, eres un idiota, las personas te miran mal y raro por lo inútil que eres... Por lo inmaduro, no le agradas a nadie, te conocen y se alejan, jamás vas a encontrar a nadie que te comprenda o te quiera...
Simplemente... Das asco...

Att: Tus voces internas.

jueves, 3 de septiembre de 2015

Diario de una gorda.

Siempre me burlo de mi físico y hago bromas, la gente piensa que es porque me acepto como soy y sólo hago bromas por eso. Pero, en realidad, las bromas van más a allá. Me refiero a que mis bromas crueles son de verdad porque a veces me insulto a mi misma, y la gente piensa que es sólo una broma.

miércoles, 2 de septiembre de 2015

Cómo sobrevivir a corazones rotos.

"Y escuchar tu voz de nuevo, fue demoledor. Dios mío, no sabía cuánto la había extrañado hasta que todo volvió de golpe a mi cabeza y deseé escuchar tu risa toda la vida".


martes, 1 de septiembre de 2015


"Jamás había escuchado reír a alguien de esa manera, me queda imposible describirla, era similar a una melodía que quieres repetir hasta quedarte dormida".

sábado, 29 de agosto de 2015

Lo siento.

Lo siento por besar tus labios en mis sueños.
Lo siento por tenerte en mi mente cuando me pierdo y cuando me encuentro.
Lo siento por imaginarte a mi lado mientras cocinaba, cantando las canciones que eran nuestros temas favoritos.
Lo siento por buscarte con mi brazo cada mañana cuando despierto, sólo para recordar que no estás allí.
Lo siento porque estamos separados.
Lo siento por estar enamorada.
Lo siento por estar aquí, mientras tú estas allá.

viernes, 28 de agosto de 2015

Y ni una sola verdad.

Hoy quemé tu carta. La única carta que me escribiste. Y yo te he estado escribiendo (sin que tú lo sepas) día tras día. A veces con amor a veces con desolación, a veces con rencor. Tu carta la conozco de memoria: catorce líneas, ochenta y ocho palabras, diecinueve comas, once puntos seguidos, diecisiete acentos ortográficos y ni una sola verdad.

jueves, 27 de agosto de 2015

"Llegué al punto en donde ya no salía de mi cuarto, no hablaba con nadie, y me saltaba las comidas, prácticamente ni existía, ¿y sabes qué?

A nadie le importo".

martes, 25 de agosto de 2015

"Me enamoré hasta de las letras de su nombre, de sus defectos, de su ternura disfrazada de frialdad. Eso me atrapó, me enloqueció, eso fue mi perdición".



sábado, 22 de agosto de 2015

Me gusta.

Me gusta la parte de ti que no tiene miedo de decir lo que siente.

Me gusta la parte de ti que no le importa lo que otros piensen.

La parte de ti que me mantiene regresando por más.

La parte de ti que no es completamente predecible, pero aún así espontánea en el momento exacto.

Amo esa parte que esta dispuesta a resolver las cosas, no importa lo mal que se pongan.

martes, 18 de agosto de 2015

lunes, 17 de agosto de 2015

No pretendo hacer constancia de mi pesimismo respecto al amor, sólo recordar a quienes aman que el amor para algunos es inalcanzable, con el sabor amargo de unas lágrimas mudas que siempre interrumpidas, respetan el sonido de un corazón aflijido.


Me ha vuelto a pasar o lo he vuelto a hacer; he dejado mi cuerpo caer, como quien tira un saco lleno de piedras al fondo de un océano, así me hundí, y yací, rápido y sin tiempo para pensar, ahora yazco inerte en ese océano, el océano del amor donde siempre sentí que el cuerpo pasaba a un segundo plano por el simple hecho de amar, quedando únicamente un corazón latente dividido en dos mitades que sólo parece ser sanado por mi incompleta alma, aunque su intento bano de aliviarme sea meterse en el hueco de la herida y hacerlo más pequeño.
El tiempo no hace las vendas para curarme, al contrario, cada día pasa siendo como el anterior, y comprimo mi pecho para hacer más llevadero este corazón roto, intento olvidar palabras que aveces hasta me esfuerzo en recordar por sentir que mi amor y cariño no está mal del todo malgastado, malgastado en otra persona que no soy yo, ahora repito lo que decía al silencio con constancia, pero sin los nervios ni la ilusión por ver una reacción, sólo como una vez más.

miércoles, 12 de agosto de 2015

Me duele tanto.

Me duele tanto.
Quiero pensar que alguna parte de ti
me ha querido alguna vez, pero me
encuentro con la realidad y con el
corazón roto.

Vivir. Quiero vivir lejos de tu recuerdo.
y dejar de morir al sentir que te pierdo.

martes, 11 de agosto de 2015

Night.

Las noches no son de quienes duermen. Las noches son de quienes tienen los ojos abiertos construyendo deseos, son de los que están sumergidos en realidades místicas esperando que llegue el momento. Las noches son de los que guardan bajo su almohada viajes en el tiempo, son de los que nadan en recuerdos y nostalgias que encienden llamas. Las noches son para desatar todas tus fases sin miedo a nada, las cómplices de los románticos eternos, de los que no somos cuerdos y nos perdemos en las oscuridades encendiendo estrellas en el cielo. Las noches son de los que abandonamos nuestro cuerpo para viajar a lugares encontrando a nuestros seres, a esos que son nuestro complemento, para velar su sueño, tatuar dibujos en su cuerpo, besar sus párpados, acariciar su cabello, terminando dulcemente descansado en su interior, llenado de paz hasta su último y más olvidado rincón.

Las noches no son de quienes duermen porque si lo fueran, los insomnios más bonitos estarían en bancarrota.


domingo, 9 de agosto de 2015

Despreocupación del olvido.

Me gustaría compartir esa sensación, compartir unas caladas, disfrutar la música, quedarme con alguien un rato en la despreocupación del olvido.



Infancia, parte 1.

La inocencia es como una venda que me ha protegido durante los seis primeros años de mi vida, a partir de los cuales fui entendiendo que no todo era un juego en el que yo era la que se ahogaba en sus propios silencios. Recuerdo tanto y recuerdo tan poco. A partir de los trece, empecé a autolesionarme, aunque mucho antes el odio y el asco que sentía ya hacía que quisiera estar muerta.
Recuerdo ser menos que nadie, siempre he sido insignificante, nunca he sentido que me quisieran.

¿Cómo debe ser que no te acaben abandonando?;
"Dios mío, me encuentro tan sola y perdida".


sábado, 8 de agosto de 2015

La nada.

No escribo para alguien
escribo para la "nada" en específico.
La nada más bella de todas.
La nada que dura para siempre.
La nada que no demuestra sus
sentimientos.
La nada que eramos y somos.
Esa nada.

Te perdono.

Te perdono por todo. Por aquel primer beso que me sacudió hasta el alma. Por hacerme volar cuando llegaste y dejarme caer cuando te fuiste. Por haberme partido el corazón y haberte librado de mi sin mi consentimiento. Por si lees esto y te arrepientes y decides volver. Por si alguna vez me necesitas, por si aún me amas, ya lo sabes...
Te perdono por todo.

jueves, 6 de agosto de 2015

Te extrañé.

"Te extrañé hoy. Te lo diría directamente pero sigo en la etapa de la negación. Así que lo escribí por aquí, para que lo leas, pero no estés seguro si es para ti; para que lo sospeches, pero no puedas confirmarlo; para que la duda me proteja mientras a ti te hace sonreír".

sábado, 1 de agosto de 2015

Sesión con el psicólogo.

Mientras estaba en ese cuarto con el que se hace llamar psicólogo, me di cuenta de que tanto yo como el somos pacientes y que el verdadero psicólogo es la vida. Porque la vida es la que nos hace pensar para sacar conclusiones y lógicas. la vida es la que nos habré los ojos para mostrarnos lo que es real, la vida es la verdadera psicóloga y cada cosa que vivimos, como cada vez que lloramos, cada vez que nos perdemos en nuestras mentes, cada vez que descubrimos algo de nosotros mismos, estamos en una sesión con ella.



viernes, 31 de julio de 2015

Art.

'Él era un homicida. Ella una suicida. 
Y fue entonces cuando se dieron cuenta...
Se amaban a tal grado que él mataría por ella
y ella moriría por él'.




viernes, 24 de julio de 2015

No lo olvides.

Cuando estás al borde del abismo; apunto de caer, cuando sólo necesitas olvidarte de todo lo que hizo llevarte hasta ese punto; es lo único que se te pasa por la cabeza, aquel "¿por qué lo hice?" o aquel "¿por que no lo hice?", te acuerdas de todas aquellas oportunidades que has desperdiciado porque tenías miedo; porque sentías que no podías, sin saber que eres fuerte y que si has superado toda esa basura y aún estás aquí es porque no le temes a todo. Yo sé que detrás de esa persona triste existe alguien con un corazón enorme y miles de historias que contar.



lunes, 20 de julio de 2015

No es que te dejara ir; antes de irte ya no estabas.

Existió un hombre para el que escribí mis mejores poemas.
Fue el mismo al que le mostré mi alma y le entregué mi corazón.

Existió alguien con quien empecé a soñar.
Fue quien me encandiló, me enamoró y logró vulnerarme.

Hubo un ser a quien le abrí las puertas de mi vida.
Fue quien conoció mis secretos, mis miedos, mis inseguridades.

Encontré a alguien que dio vuelta a mi mundo,
que me hizo reír y llorar,
que me empujó a cometer locuras
y a hacer todo por estar a su lado.

¿Y quién fue ese hombre?

El mismo que no quiso quedarse conmigo.


sábado, 27 de junio de 2015

Laberintos.

- Mi cabeza es un laberinto oscuro. A veces hay como relámpagos que iluminan algunos corredores. Nunca termino de saber por qué hago ciertas cosas.

Todo es mental.

Nada te persigue, nada te atormenta, es tu miedo... eres tú.

Decepciones.

No somos personas frías por falta de sentimientos, sino por abundancia de decepciones.

viernes, 26 de junio de 2015

'Cuando veo mis cicatrices me prometo a mi misma no volver a cortarme pero siempre rompo esa promesa cuando me miro al espejo y entonces recuerdo él porque de que ellas estén en mi muñeca... Siempre estarán ahí y con ellas ese recuerdo que me desvela noche tras noche y que nunca va a desaparecer'.

'Acumular'.

Acumular dolor sin convertirlo en palabras, acumular amor sin convertirlo en abrazos, acumular penas sin llorarlas.

martes, 16 de junio de 2015

Como la miel.

Entonces, en la oscuridad de la habitación, bailando a solas, sin más compañía que las tijeras, sintió que era feliz. El fluido de vida corrió como la miel cálida por sus brazos, por sus manos. ¡Que dulce era la muerte!, pensó antes de cerrar los ojos.

lunes, 15 de junio de 2015

Sentidos nulos.

Cuando tu vida es un asco, das todo por perdido. Incluso te pierdes a ti mismo. Las personas al perderse, ahogan sus penas y dolores de formas diferentes. Ahogan su dolor en alcohol, drogas, llorando solos en su habitación, lastimándose a si mismos. O simplemente deciden acabar con todo, y se quitan la vida. El dolor nos vuelve vulnerables, y ahí es cuando hacemos cosas... no muy buenas. Pero claro, no nos importa. Es nuestro dolor, nuestra pena, nuestra vida, ¿qué les importa a los demás?
Nos volvemos fríos y egoístas.

domingo, 14 de junio de 2015

- ¿Te dolió mucho? -Quiso saber.
- No, de verdad.
- ¿Qué pensabas cuando...?
- ¿Cuando salía sangre y me veía desfallecer?
- Sí.
- Sentía paz. Una paz infinita. ¿Sabes de esas chicas que se cortan los brazos con una cuchilla de afeitar, llenándose de heridas y más heridas? Lo hacen para liberar el dolor.
Están tan llenas de él que únicamente así superan esa ansiedad. En mi caso el dolor era tanto que no podía solo cortarme. Necesitaba morir.